Andrés Webb: “Todos fuimos invencibles hasta que nos enamoramos por primera vez”
A sus 29 años, Andrés Webb Villalobos todavía cree en el amor y, mediante su arte, quiere inspirarnos a sentirlo.
Él recuerda que, desde niño, garabateaba en sus cuadernos y dibujaba muy bonito. Esta habilidad incipiente le permitió ganar un concurso en la escuela para ilustrar la portada de un libro (aunque nunca lo vio publicado). De ahí en adelante pasó por otras expresiones artísticas como la música y el teatro, pero la ilustración nunca lo dejó ir.
Por mucho tiempo Webb vio sus garabatos de cuaderno más como un gusto culposo y un medio de expresión solitario, sin pensar que en un futuro podría gritarle su talento y su forma de pensar al mundo a través de ellos.
Con más años de edad y ejerciendo su profesión de publicista y productor audiovisual, el ilustrador descubrió el arte digital y el diseño publicitario. Y siguió ganando concursos. Sus diseños se abrieron lugar en espacios como Proyecto Hashatg con #musicacr, la marca de ropa Threadless y el evento Social Media Day.
Su arte también llegó a los ojos de la agencia de publicidad Crea y le abrió las puertas para desarrollarse profesionalmente en este lugar. Su labor en la agencia le permitió mejorar su estilo y crear la identidad gráfica que posee hasta el día de hoy. “Estar trabajando ahí y ver que las cosas que estaba dibujando e ilustrando estaban llamando la atención me dio valor para mostrar más las cosas que estaba haciendo.”
Tras una larga trayectoria de empirismo, en el 2014 Webb tuvo la oportunidad de recibir por primera vez una educación formal en las artes plásticas. En setiembre de ese año el artista viajó a Madrid a estudiar Ilustración Editorial en la Escuela Superior de Dibujo Profesional. Durante un año aprendió tanto técnicas de ilustración (acuarelas, acrílicos, pasteles, lápices de color, tintas, etc.), como de interpretación de contenidos para la creación artística.
“Yo tenía muchas cosas que expresar, pero a veces sentía que lo que estaba haciendo se quedaba muy limitado. Tal vez yo agarraba acuarelas o acrílicos o wash, pero no sabía cómo darles el uso técnico profesional.”
Ahora Webb sabe muy bien lo que quiere. Él quiere inspirar amor en la gente, pues el amor y el desamor son lo que más lo mueve. Con sus obras espera que las personas sientan cosas y que ellas, a su vez, quieran compartir esos sentimientos. Sus ilustraciones son infantilizadas, como fábulas artísticas, tiernas y graciosas. Normalmente también entremezclan el lettering: frases concisas y astutas. A partir de estos ideales el joven ha conceptualizado todos sus proyectos.
“Actualmente estoy a punto de lanzar mi primer álbum ilustrado que se llama ‘Historias cortas de corazones rotos’, que va por el lado más triste del amor. El concepto de este libro es que todos fuimos invencibles hasta que nos enamoramos por primera vez. De ahí salió una serie de ilustraciones de personajes que están sufriendo, más frases que son un tipo de pensamiento que la gente en general tiene cuando le han roto el corazón. […] Estando allá (en España) también desarrollé un cuento infantil que se llama ‘El erizo que quería un abrazo’. Va medio triste pero es más infantil, entonces tiene un final feliz y una moraleja, a diferencia del otro.”
Otra de sus colecciones, “The Best Show You’ll ever had”, está expuesta en el centro cultural Casa Batsú. En esta él combina tres expresiones artísticas que siempre le han gustado: la música, la ilustración y el amor. Las escenas se desarrollan en un concierto en donde las miradas traviesas se cruzan, los espíritus se mueven a un mismo son y todos los sueños son posibles de cumplir. “’¿Qué pasa si hacemos el amor hoy?’ ‘Jale a bailar.’ ‘Dame un momento para recordar toda la vida.’ Es lo que trato de plasmar en todas las piezas.”
Andrés Webb estará ilustrando en vivo el 9 de setiembre en Casa Batsú, durante la segunda edición del Music Doodle Session. Junto a las bandas nacionales The Hills y Papin y los Perrobots interpretará el concierto y creará dos piezas llenas de sentimiento.
– “¡Ojalá que todo el mundo salga enamorado!”